Meme, os invito a comer

Alguno que yo me sé ya se está escojonando de risa al leer el titular de este post, ya que me conoce muy bien y por supuesto conoce mis gustos culinarios los cuales califica de patéticos, y lo son. Otro día prometo hablar de mis gustos por las mujeres, los hombres y ambas cosas al mismo tiempo.

Este meme me lo pasó, no sé si a mala leche o porque un día empezé a dejar comentarios en su blog, Guitar on the Rocks. Debo reconocer que no soy nada amigo de los memes, pero nobleza obliga, y aunque con retraso (de tiempo, no mental) ahí va:

Se trata de decir cómo me lo montaría si invitara a casa a comer a alguien. Uff, habría que matizar lo de alguien. Si ese alguien es Jeremy Fox, ya le digo a él que se traiga la comida consigo ya que yo pongo la casa. Lo mismo se puede decir de mis otros amigos a los que paso de nombrar porque luego me lo echan en cara. Si ese alguien es una mujer también hay que matizar. Si está casada no hay tiempo para comer, por lo menos alimentos. Si es mi novia hay una contradicción, no puedo invitarla a comer a mi casa, porque ella ya vive conmigo y como vive conmigo no le tendré la comida preparada, cosa que ocurre 9 días a la semana, asi que la invitaré a comer en el bar de cerca de casa que dan unas raciones cojonudas. Por cierto, yo siempre me pido o croquetas o milanesa, acompañadas o de una cerveza o de una Pepsi. Si estuviera en esa fase que tanto gusta a las mujeres que es la de la seducción, evidentemente me lo curraría, pero no voy a publicar aquí mis mejores armas, las cuales nunca me han follado, perdón, fallado.

Si se trata de una de esas reuniones de colegas para ver una pelio o algo parecido la cosa cambia. Todos los lunes por la noche desde hace más de 10 años un querido amigo y yo nos reunimos para ver una película. Normalmente en esos casos me compro algunas cosillas en el Open Cor para hacerme un sustancioso bocata. Él que se haga lo que quiera.

Si se trata de la noche de los Oscar (cita obligada para un servidor desde tiempos inmemoriables) la cosa también cambia. Como seguramente seremos varios, cada uno aporta alguna cosa: cacahuetes, patatas fritas, refrescos, fiambre en abundancia, en fin, un verdadero festín digno de los mejores comensales. Esa noche no sé que demonios pasa que siempre sobra de todo y en cantidad.

En fín, las verdaderas cenas o comidas, las de los detalles, esas me las guardo para mí y mi intimidad. Y ahora os dejo que creo que ya abre el MacDonald´s. Le paso el meme a quien quiera cojerlo.