adiós, Anne

Nos ha dejado Anne Bancroft, una de esas actrices que no destacaron por su belleza, aunque para algunos de nosotros era irresistible, pero que eran capaces de llenar toda una pantalla con su mirada, entre tierna y agresiva.
Casada desde hace unos 40 años con Mel Brooks, muchos nos preguntábamos que había hecho Mel para conseguirla, o que había visto ella en él, visto los resultados de muchas de sus películas como director, aunque no como productor, todo hay que decirlo.
Consiguió el Oscar por EL MILAGRO DE ANNA SULLIVAN, una película que tengo un tanto olividada, asique tendré que recuperarla, Jeremy Fox, dejámela.
Pero hay concretamente dos películas en las que yo estuve locamente enamorado de ella, esa obra maestra de John Ford SIETE MUJERES, una película de actrices donde se comía al resto del reparto, y LA CARTA FINAL, una peliculita que pasó casi desapercibida por el público, y que narraba una historia de amor epistolar, con algunas secuencias de una fuerza emotiva verdaderamente atípicas, dirigida por David Jones, y coprotagonizada por Anthony Hopkins, no tiene desperdicio.
Adios Anne, dale recuerdos a todos los grandes que te dirigieron, no te olvidaremos jamás.