La fuerza del amor
"HORAS DE LUZ"
Hace poco se ha editado en dvd esta película que ha pasado sin pena ni gloria por las pantallas de nuestro país.
Con la etiqueta de "basada en hechos reales" nos narra la historia de un preso (hermético Alberto San Juan), encerrado de por vida por el asesinato de varias personas. En la cárcel conocerá a una mujer (extraña Emma Suárez) que trabaja en la enfermería, de la cual se enamorará, y ella de él.
Desde el principio la película va directa al grano, no se nos explican las motivaciones del personaje en ninguna de las situaciones: los asesinatos, algún que otro motín en la cárcel, el hecho de que repente le de por intentar ser alguien con cultura y se pone a leer todo tipo de libros, etc.
Tampoco está bien explicado el hecho de que el personaje femenino se enamore de un preso que no tiene nada en la vida, tendría que dar pena, pero la pena jamás da pasa al amor. Saltado este punto, los dos irán conociéndose poco a poco, tanto intelectualmente como físicamente, y tratarán de derribar las barreras que el sistema pone entre ellos dos. Esto último hace mucha gracia, pues estamos hablando de alguien que ha matado a cinco personas a sangre fría, y sólo porque sí; pero en la película está mostrado a la buena de Dios y su arrepentimiento tenemos que creérnoslo sólo porque Alberto San Juan pone cara de que ha hecho algo malo. O sea, está mal contada, a pesar de algún momento aislado que está conseguido. Nota: 4
cantado por Alberto Abuín @ 4:48 p. m.
6 Comments:
me va gustando como metes tu filosofía y forma de ver la vida en tus posts...
"pero la pena jamás da pasa al amor"...
a lo mejor no, pero consigue que mucha gente haga cosas por compasión, bien sea dar limosna, atender a gente que nos parece desprotegida, etc... no dará paso al amor, pero desde luego la pena y dar pena es un reclamo para la compañía...
por otro lado, no pienso ver la peli... a menos que me la ponga en la primera de TVE (y eso seguramente, porque casi todas las españolas las compran para emisión)
claro, claro, ya vi como le dabas limosna al tío que te la pidió en el bar el otro día, ah no...espera le diste ropa no? porque pasaba frío, no espera, le pagaste una pensión para que pasara la noche y no lo hiciera debajo de un puente.
La pena es lo último que se debe sentir por alguien, ya que lo rebajas, y dar pena para conseguir algo o a alguien (sobre todo esto) pues peor todavía, porque normalmente no funciona, y si funciona es un error ya que es mentira, y si es mentira no es... (termina tú la frase)
Guapetón.
No sé terminar la frase, lo siento.
No sigo el razonamiento.
Sé que la pena es muy fácil de dar, solo hace falta llorar un poquito, hacer pucheritos, decir que eres pobre, etc... y es lo que desgraciadamente se lleva y se refleja en el cine español.
No digo de esta película, porque no la he visto, pero entre dar pena y otros valores, el cine español es un digno reflejo de los españoles. Vamos, que si al final el malo maloso de esta peli va a dar pena...
Mira, un buen reflejo sería tratar la peli como THE WOODSMAN. Tu que has visto las dos dime si los tratamientos son distintos.
Pues has dado en el clavo, a partir de ahora pondré estos dos ejemplos. Vamos, ni color, la una con la otra, efectivamente el tratamiento de THE WOODSMAN es el mejor.
Y cierto lo del cine español usando esa treta, si al menos lo supieran disfrazar, pero no.
la verdad es que si, el cine español es un reflejo de los españoles (yojimbo dixit) y por eso da pena, pero no las pelis (bueno tambien), sino el personal que trabaja en ellas. Aplicate el cuento Yoji
uisssss, spifer...
me da la impresión de que nos conocemos y quieres darme una lección o aconsejarme con mi propia opinión cuando todavía estoy dando mis primeros pasitos profesionales...
:)
cuando suelo criticar algo o alguien es porque lo creo y por supuesto no trato de caer en esos mismos errores... y cuando caigo me pregunto por qué lo he hecho y si ha sido a propósito o involuntario, sin haber sido consciente... desde luego mi firme intención es hacer trabajos como EN LA CIUDAD SIN LIMITES, de una entereza y tratamiento apenas vistos en nuestro cine; no toman al espectador como imbécil y no le alecciona sobre nada, simplemente cuenta una gran historia con la apariencia de un thriller (nunca me cansaré de recomendarla).
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